A pocos días que se conmemorára el hoy 44 aniversario de la muerte de Orlando Mazara y luego de haber analizado los testimonios de quienes junto a él compartieron en esta ciudad, pude vislumbrar y asegurar que este revolucionario implacable es el mas noble referente de firmeza, arrojo y valentía que debe tener la juventud Dominicana de hoy día. Orlando Mazara, es un ejemplo a seguir por la juventud, ante tantas adversidades, faltas de oportunidades, vicios y amenazas por demás.
Ante la creciente inversión de valores que vive nuestra sociedad, creo necesario emular el arrojo que tuvo este seibano que se jugó todo, incluso la vida, por defender lo que creía justo, lo que era pertinente para la patria Dominicana.
Ante los grandes retos que hoy a los jóvenes nos plantea la vida, no debemos de fallar, no debemos dar un paso atrás.
¿Por qué claudicar y doblar las rodillas?, cuando hay tanto camino por recorrer hasta que algún día nuestro país sea, o por lo menos se asemeje a lo que aspiraron aquellos que soñaron con una patria más justa para todos, aquellos que como Orlando Mazara murieron por la libertad, por la justicia y la igualdad de todos y todas.
Soy de opinión que hay muchas cosas por la qué, como aquellos del 1J4 lucharon, hoy la juventud debe enfocar su vista hacia el cambio del sistema partidario corrupto que nos ha mancillado, arrodillado, y que inmisericordemente ha dilapidado las riquezas de esta patria.
Hoy que debemos ver con impotencia como algunos asaltan las arcas del estado, se enseñorean de la cosa pública, y se llevan entre sus uñas el trabajo de los que han dado todo por este país, hoy debemos decir ya, debemos decir hasta aquí, basta de que a quienes les pagamos para que nos protejan se hagan cómplices de los que nos envenenan el futuro con sustancias que funden los cerebros de nuestra juventud.
Basta de que se haga silencio, basta de que por la tradicional complicidad gubernamental que siempre nos ha defraudado, hayan tantos con tan poco desde siempre y pocos con tanto de la noche a la mañana.
Orlando Mazara, lastima que quienes tienen que enseñar de tus proezas no las sepan, lastima que en un libro de texto de historia tu nombre raramente aparezca.
Que mal que no se pretenda educar una juventud que siga tus ideales. Malaya sea que no se invierte lo necesario para que tu vida, tu ejemplo, tu historia y tu fecha sean recordadas y veneradas.
La impotencia me consume por que tu familia no tiene ni una foto para recordarte, porque hasta eso trataron de hacer, quisieron hacer que hasta tus más allegados te olvidaran, más sé que de sus memorias nunca lograron hurtarte.
Siento que hoy hay muchos/as que desconocemos el gran luchador, el ilustre joven que fuiste.
Ante la creciente inversión de valores que vive nuestra sociedad, creo necesario emular el arrojo que tuvo este seibano que se jugó todo, incluso la vida, por defender lo que creía justo, lo que era pertinente para la patria Dominicana.
Ante los grandes retos que hoy a los jóvenes nos plantea la vida, no debemos de fallar, no debemos dar un paso atrás.
¿Por qué claudicar y doblar las rodillas?, cuando hay tanto camino por recorrer hasta que algún día nuestro país sea, o por lo menos se asemeje a lo que aspiraron aquellos que soñaron con una patria más justa para todos, aquellos que como Orlando Mazara murieron por la libertad, por la justicia y la igualdad de todos y todas.
Soy de opinión que hay muchas cosas por la qué, como aquellos del 1J4 lucharon, hoy la juventud debe enfocar su vista hacia el cambio del sistema partidario corrupto que nos ha mancillado, arrodillado, y que inmisericordemente ha dilapidado las riquezas de esta patria.
Hoy que debemos ver con impotencia como algunos asaltan las arcas del estado, se enseñorean de la cosa pública, y se llevan entre sus uñas el trabajo de los que han dado todo por este país, hoy debemos decir ya, debemos decir hasta aquí, basta de que a quienes les pagamos para que nos protejan se hagan cómplices de los que nos envenenan el futuro con sustancias que funden los cerebros de nuestra juventud.
Basta de que se haga silencio, basta de que por la tradicional complicidad gubernamental que siempre nos ha defraudado, hayan tantos con tan poco desde siempre y pocos con tanto de la noche a la mañana.
Orlando Mazara, lastima que quienes tienen que enseñar de tus proezas no las sepan, lastima que en un libro de texto de historia tu nombre raramente aparezca.
Que mal que no se pretenda educar una juventud que siga tus ideales. Malaya sea que no se invierte lo necesario para que tu vida, tu ejemplo, tu historia y tu fecha sean recordadas y veneradas.
La impotencia me consume por que tu familia no tiene ni una foto para recordarte, porque hasta eso trataron de hacer, quisieron hacer que hasta tus más allegados te olvidaran, más sé que de sus memorias nunca lograron hurtarte.
Siento que hoy hay muchos/as que desconocemos el gran luchador, el ilustre joven que fuiste.
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